Αποτελέσματα Αναζήτησης
6 Ιαν 2016 · Al hablar de dones espirituales y de cómo sabemos cuál es nuestro don, tal vez lo primero que debemos entender es que la Biblia nos da al menos cuatro listas sobre los dones espirituales (1 Co. 12:4-6,8-10, 28-30; Ro. 12:3-8; Efe. 4:11; 1 Pe. 4:10-11), y ninguna de estas listas son exhaustivas.
30 Ιουλ 2024 · Hay distintas formas de servir, pero todos servimos al mismo Señor. Dios trabaja de maneras diferentes, pero es el mismo Dios quien hace la obra en todos nosotros” (NTV). ¿Qué es un don espiritual? Dios tiene un propósito para tu vida, y tus dones espirituales son las herramientas que Dios te da para hacer el trabajo que te pide que hagas.
7 Αυγ 2024 · En las palabras de John Stott, un reconocido teólogo, “Los dones espirituales son expresiones visibles de la gracia invisible de Dios.”. a. La Diversidad de Dones y Su Origen. En los versículos 7-11, Pablo nos dice que cada uno recibe la manifestación del Espíritu para provecho. Esto significa que cada creyente tiene al menos un don ...
19 Σεπ 2024 · El don de la fe puede definirse como la capacidad especial mediante la cual el Espíritu infunde a los cristianos una confianza extraordinaria en las promesas, el poder y la presencia de Dios, permitiéndoles asumir posiciones heroicas para el futuro de la obra de Dios en la iglesia.
22 Μαρ 2021 · El don espiritual más importante es el amor al prójimo, primero en la iglesia y luego en todo el mundo. Que el Espíritu de Dios nos llene de fe, esperanza y amor por los hermanos y las hermanas en la iglesia.
Los dones que Dios nos da a través de su Espíritu deben ser usados para su gloria (Colosenses 3:17). La "manera excelente" de hacerlo es con amor (1 Corintios 12:31b; 13:1-13). Cualquier don usado para ganancia personal o sin amor es como un ruido estridente para Dios y la iglesia.
14 Ιουλ 2015 · A la luz de lo que la Palabra de Dios dice y de este significado en el original, podemos decir que un don espiritual es la habilidad sobrenatural dada por Cristo al creyente por medio del Espíritu Santo, en el momento de su salvación o después, para el servicio del cuerpo de Cristo.