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Los huesos son un conjunto de estructuras orgánicas rígidas, mineralizadas mediante la acumulación de calcio y otros metales. Constituyen las partes más duras y resistentes del cuerpo humano y de otros animales vertebrados (únicamente superados por el esmalte dental).
Los huesos se clasifican usualmente en cinco tipos: planos, largos, cortos, irregulares y sesamoideos. Los huesos del cuerpo humano tienen muchas funciones importantes. Principalmente, son los responsables de la rigidez somática, el contorno estructural, la postura erguida o bipedestación y el movimiento.
Los huesos se clasifican en diversos tipos según su forma. Un hueso largo (como el fémur o el húmero) consta de las siguientes partes: Diáfisis: es el cuerpo o porción cilíndrica principal del hueso. Epífisis: son los extremos proximal y distal del hueso.
El conjunto organizado de las piezas óseas (huesos) forma el esqueleto o sistema esquelético. Cada pieza cumple una función en particular y de conjunto en relación con las piezas próximas a las que está articulada. En el hueso existen diferentes variedades de tejido.
30 Οκτ 2022 · El esqueleto se subdivide en dos divisiones principales: la axial y la apendicular. El esqueleto axial forma el eje vertical central del cuerpo e incluye todos los huesos de la cabeza, cuello, pecho y espalda (Figura 7.1.1 7.1. 1). Sirve para proteger el cerebro, la médula espinal, el corazón y los pulmones.
El sistema óseo o sistema esquelético es una compleja y resistente estructura, formada por diferentes tipos de huesos, que constituye el esqueleto del ser humano. Sus funciones principales son: dar sostén al organismo y protección esencial a los órganos internos.
El esqueleto humano se divide en dos partes: Esqueleto axial, formado por el cráneo, columna vertebral, costillas y esternón. Consta de 80 huesos. Esqueleto apendicular, formado por los huesos de los miembros superiores e inferiores junto con las cinturas escapular y pelviana. Consta de 126 huesos. El esqueleto tiene varias funciones: